- 30 MIN
- 24 RACIONES
Una propuesta dulce que destaca por ser una rosquilla que casi se deshace en la boca y con un sabor espectacular.
Ingredientes
- 100 ml de bebida de soja Vivesoy.
- 100 ml de anís seco.
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra.
- 180 gr de azúcar.
- 1 sobre de levadura de repostería - 16 gramos -
- La cáscara de un limón.
- La ralladura de un limón.
- 350 gr de harina de repostería.
- 4 huevos medianos.
- Se necesita una buñolera.
Preparación
- Poner a calentar los 100 ml de Vivesoy con la cáscara de limón. Cuando hierva, retirar del fuego, sacar la cáscara de limón y reservar.
- Batir bien los huevos en un cuenco.
- Añadir el resto de los ingredientes con la harina tamizada y seguir batiendo.
- Poner el molde a calentar en un cazo hondo con abundante aceite de oliva virgen extra.
- Sacar el molde del aceite y rellenarlo hasta la mitad con ayuda de un cucharón. Introducirlo en el cazo. Poco a poco se despegará la masa. Dar la vuelta con cuidado cuando veamos un lado tostado.
- Sacar y escurrir bien sobre el papel de cocina. Dejar templar y pasarlas por azúcar.
CONSEJOS
- Si pones el aceite demasiado caliente se harán muy pronto por fuera, quedándose sin hacer por dentro. El aceite tiene que estar caliente pero no muy fuerte.
- Si el aceite está demasiado frío se abrirán y no quedarán bonitas. Al hacer la siguiente tanda sube un poco más la temperatura del aceite. Mi consejos es que hasta que le cojas el truco, empieces friendo de una en una: es más fácil darles la vuelta y controlar la temperatura.
- Si no tienes buñolera, puedes usar una cuchara sopera. Caliéntala bien en el aceite, coge con ella una pequeña porción de masa y métela en el aceite. Tendrás unos pequeños y deliciosos buñuelos, en vez de rosquillas.